sábado, 1 de diciembre de 2012

SHIMANO TYRNOS 30 LB.- DESMONTAJE BÁSICO Y MANTENIMIENTO

Hoy toca un Shimano Tyrnos 30 libras, un carrete rápido, suave y cómodo, lástima que no pueda decir lo mismo de la calidad de sus componentes. Se trata de un carrete algo complicado, con excesivos mecanismos, algunos de los cuales de difícil acceso, piezas y tornillos pequeñísimos y roscas en grafito. En fin, cada vez me gustan más los carretes americanos. Es un gran carrete siempre y cuándo no tengas que destriparlo, no obstante, vamos a hacerlo. Aquí nuestra víctima.

Lo primero que desmontaremos será la placa izquierda, para ello y por motivos de comodidad, quitaremos la manivela, que como es tradicional, va asegurada con un tornillito que evita su desenroscado accidental.

Una vez fuera, volteamos el carrete y aflojamos los cuatro tornillos que aseguran la placa.

La forman dos partes, una cubierta metálica protectora y la placa en sí, de grafito y en la que tenemos un rodamiento y el mecanismo de la chicharra.

Al quitarla nos queda a la vista el carretel. Desmontaremos la argolla del arnés quitando los dos tornillos que la aseguran, son de diferente tamaño, el más largo tiene una parte del espárrago sin rosca y es de cabeza para un destornillador de pala, el otro y más pequeño es de estrella. Desconozco el motivo por el que son de diferentes tamaños y más extraño aún es que se necesiten dos destornilladores diferentes para actuar sobre ellos. Me temo que es una frivolidad que choca totalmente con la mentalidad nipona.

Aquí los tornillitos de marras.

Procederemos a "grasear" los agujeros de los tornillos y la chicharra, y montaremos la argolla.

Como digo al principio, este carrete tiene demasiados tornillos, así que para evitar pérdidas y confusiones, desmontaremos y montaremos por partes. Aquí nuevamente la placa izquierda, una vez en su lugar.

Volteamos el carrete. Y nos disponemos a quitar el mecanismo de freno, rueda de tensión y leva. Para ello llevamos la palanca a la situación de "Free", y desenroscamos totalmente el tapón central.

Aquí sus componentes, un muelle, el tapón roscado, la palanca y la pieza de bloque, también tiene una arandela que ha quedado fuera de la imagen.

Para quitar la tapa sacaremos estos cinco tornillos, los tres superiores dejarán libre la chapa-guía de la palanca de freno.

Quitada la carcasa metálica, nos quedarán a la vista, otros seis tornillos. Fuera con ellos.

Ya podremos separar la placa derecha y sacar el carretel.

También sacaremos la argolla del arnés, esta vez el tornillo largo va a la derecha y el corto a la izquierda. Pondremos grasa en todos los agujeros de los tornillos.

A diferencia de los Penn, en estos carretes la pieza que se sujeta al portacañas no es desmontable, quitamos los tornillos de la abrazadera y engrasamos.

El piñon del eje encaja en el carretel por una parte de engranaje de menos diámetro, tenedlo en cuenta para el posterior montaje. Limpiamos bien, añadimos aceite Penn en el eje, y algo de grasa al piñón.

Nos encontramos nuevamente con otra tapa y seis tornillitos muy pequeños. Quitamos los tornillos y nos quedará suelto un marco metálico y la tapa de grafito que protege los discos de freno.

Nos quedará libre el disco de freno metálico y el disco de carbono troquelado. Decir que este disco de carbono es de extrema delgadez, hay que tener cuidado con él porque al menor descuido, te lo cargas. A pesar del poco uso del carrete ya tiene muestras de desgaste. Es curioso ver como, siendo la potencia de freno una de las características de este carrete, dispone de un sistema tan frágil. Por algún lado falla, o el disco es de una calidad increible o existe demasiada propaganda interesada.

En el eje nos encontramos otro rodamiento que será engrasado con aceite y un muelle cuya misión es separar los discos cuándo aflojamos freno.

Otra cosa que no me gusta es que los rodamientos van sin escudo, así es más fácil para engrasar, pero quedan totalmente desprotegidos ante una eventual entrada de agua o resíduos salinos.

Una vez engrasado el rodamiento, eje, piñón, marco metálico y agujeros de tornillos, procedemos a su montaje, es buena idea usar alguna guía para alinear los agujeros, recordemos que la rosca está realizada en el plástico y con los tornillos tan pequeños no será difícil estropearla.

También damos algo de grasa por el exterior.

El siguiente paso consiste en la inspección y engrasado del mecanismo de giro. Nuevamente nos encontramos con cuatro tornillos, más pequeños aún, roscados en plástico, son los marcados en rojo. También tenemos una pieza de extrema fragilidad, la marcada en verde, que es una especie de protección para evitar rozamientos del eje del engranaje con la tapa plástica, mucho cuidado con ella, sobre todo al montarla, se daña fácilmente.

La citada tapa con sus tornillitos y el agujero dónde juega la pieza plástica. Ojo que los dos tornillos superiores son más pequeños que los inferiores.

A la vista el engranaje de giro, son dos discos dentados, el más pequeño queda tapado abajo, una tuerca y la pieza blanca que entra por presión.

Quitamos la arandela roscada y queda desmontado el mecanismo, dos rodamientos, los retenes del antirretorno, un eje, dos piñones y una arandela, limpiamos y engrasamos.

También nos queda a la vista los dos retenes del antirretorno cuyos muelles estarán actuando y que deberemos mover cuándo coloquemos nuevamente el engranaje.

Para ello, primero debemos poner el piñón inferior con su eje, con un destornillador pequeño o punzón, separaremos cada retén de manera que dejen bajar el piñón y juegen en su lugar.

Una vez colocado el piñón inferior, introducimos en el eje el superior y roscamos la tuerca, también debemos poner, por presión, el ¿rodamiento? plástico.

Mucho cuidado al poner la tapa, debemos hacer coincidir la pieza plástica blanca con el agujero correspondiente de la tapa, cualquier presión indebida, la deforma. Aplicamos grasa a todos los agujeros y carretel, caso de no haberlo hecho anteriormente.

Ponemos la placa en su lugar, y aseguramos con sus tornillos.

Damos un poco de grasa a la parte interior de la cubierta metálica y colocamos en su lugar. También echaremos un poco de aceite en los resortes de "Free" y "Strike". Y atornillamos.

También colocaremos en su lugar la placa troquelada de la leva.

Ya solo nos queda montar el conjunto de la palanca de freno (leva, muelle, tuerca troquelada y tapón roscado). Recordad que lo teníamos por ahí, separados.

La tuerca y en su parte inferior lleva unos tetones que deben encajar en la cuna de la palanca, y también y muy importante, debe encajar con la tuerca fija al eje del mecanismo de freno.

Recordad que para montar el freno, debemos colocar la palanca en "Free", y apretar el tapón, para vencer la resistencia del muelle, esto lo haremos con el dedo índice de una mano y roscaremos, sin dejar de hacer presión con el dedo, con la otra mano, en el momento que pille varias vueltas de rosca ya podremos quitar el dedo.
Como no vamos a usar el carrete hasta la próxima temporada, probaremos que funciona todo correctamente y el freno lo dejaremos sin apenas presión.

Aquí nuestra víctima preparada para brindarnos muchas jornadas de alegrías.

NOTA IMPORTANTE: En España creo que no se hablado del tema, probablemente porque aquí no haya llegado ninguna partida de carretes defectuosos pero existen problemas con los modelos pequeños de este carrete, desde el Tyrnos 16 hacia abajo de los fabricados en Malasya. El disco de freno de carbono se deshace por una mala fabricación del mismo, si tenéis alguno os interesaría comprobar el estado de dicho disco. Shimano los estuvo sustituyendo gratuitamente, aún no estando en garantía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario